SEXO y mas SEXO…
Es lo primero que le viene a la mente a un hombre cuando su mujer le comenta “¿oye, y si nos quedamos embarazados?” Aaah…pero tiene truco! Lo que no sabes es que es una carrera de fondo, un “tiene que ser ahora y no puede ser luego”, un “!ahora mismo que estoy ovulando!”!!! Y al final, en vez haber practicado sexo te sientes como una herramienta mas que ha sido usada, como un pene anónimo cuya única misión es procrear, y en contra de lo que puedan pensar algunas madres y la gran mayoría de las mujeres de la tierra, si, ¡los hombres también tenemos nuestro corazoncito! Ver como te cosifican y te identifican tan solo por una parte de tu anatomía que anula todo lo demás, porque es imprescindible y necesaria, también nos duele
Luego llega la fase de la espera… si, esa en la que tu mujer compra kilos de test de embarazo por Internet (porque salen más baratos) y se hace uno cada media hora o al menos es lo que parece. Tu, tratando de ser objetivo y quitarle hierro al asunto, le dices: “cariño, que sea lo que tenga ser y si no lo seguimos intentando, aun somos jóvenes…”, pero no, test cada media hora. Personalmente, creí haber convencido a mi mujer de que en el momento oportuno el test daría positivo o negativo, que no hacía falta que se hiciera un test cada media hora, ni de que parara en todas las farmacias a comprarse uno nuevo. Ignorante de mi…
Por norma general, los padres a estas alturas ya nos hemos hecho una idea de cómo va a ser el embarazo y participamos de buen grado en todo lo que nuestra mujer nos pide, nos armamos de paciencia y de ese manido “si cariño, lo que tu quieras” que siempre funciona (aparte de que seria letal llevarles la contraria).
Y llega el día en que, aun sin haber amanecido, noto un contacto leve pero insistente en el brazo hasta que abro un ojo y me encuentro con que a menos de 2cm de mi globo ocular tengo un test de embarazo ¡POSITIVO! Y lo primero que se me ocurre decir medio dormido es “ya sabía yo que no te podías esperar” y tras un silencio mutuo, la cara de perro de mi mujer por mi falta de tacto ante semejante notición y de quedarnos pasmados mirando al techo… llegaron las temidas palabras: BUENO Y ¿AHORA QUE?
A partir de entonces, para mi, todo fue una vorágine de ir y venir de compras, de comparativas, de consejos de todo el mundo… pero en realidad, para el padre que no siente cada uno de los procesos de semejante metamorfosis como sí lo hace la mujer, el embarazo, el hecho de tener un bebé, es simplemente una idea abstracta que está en nuestra cabeza, con la que jugamos y fantaseamos. Si, está clarísimo que en breve la familia tendrá un miembro mas, un bebé, algo a lo que como hombre nunca me había enfrentado, pero no sé si era simplemente por pragmatismo o por su inevitabilidad, estaba muy tranquilo, era muy consciente y participativo en todo, de hecho el nombre de mi hija lo elegí yo.
Tras 9 intensos meses de embarazo llego el momento del parto… Aun recuerdo como apuntaba la hora y la duración de las contracciones en un papel, esa era mi principal misión, poco mas podía hacer hasta que se hizo patente que debíamos salir hacia el hospital! Fue rápido, en menos de lo que pensaba estábamos plantados en el mostrador del hospital y ¡ZAS! Mi mujer rompe aguas allí mismo: “Por favor, una silla de ruedas, una camilla, algooo! ¿Llevo las bolsas? Que mi mujer ha roto aguas!!! Y ahora que tengo que hacer?!!”
Una vez en la habitación tienes que ayudar a tu mujer a desvestirse, ponerle un camisón que no le tapa nada, preparar la futura cunita del bebé… y cuando crees que ya está todo hecho, viene una enfermera que te da un tubito y te dice “toma, tienes que ponerle esto” y tú la miras, miras el tubito y dices que sí como un bobo, hasta que se va la enfermera y ves que te ha dado un enema… “¿En serio? Es necesario??” Y como quieres a tu mujer y ya no hay secretos entre vosotros haces de tripas corazón y se lo pones.
Y cuando la bajaron al paritorio perdí a mi mujer… me la cambiaron por ¡la niña de El Exorcista!. Las contracciones ya eran muy dolorosas, era un suplicio, la veía retorcerse de dolor, la veía pálida, en esos momentos me habría cambiado por ella sin dudarlo, creo que se lo dije un millón de veces, que si podía hacer algo por ayudar, que si podía ir a buscar a alguien. Y allí estaba yo vestido con un ridículo traje verde y sin poder hacer nada para ayudar a mi mujer, simplemente estar (y hacer alguna broma fácil con mi nueva vestimenta, jajaja, a ver si así le sacaba una sonrisa). Por fin llegó el anestesista y fue como ver a Dios con la bendita epidural… entonces recuperé a mi mujer, vi como se le iba el dolor de los ojos y una tímida sonrisa asomaba a sus labios.
Es el momento…. Yo estaba allí en el paritorio, junto a ella, y aunque veía a mi mujer mas calmada estaba preocupado y algo nervioso. Y en ese momento trascendental no se te pasa otra cosa por la cabeza que debatirte mentalmente entre la curiosidad por mirar y o el terror de no quitarte de la cabeza esa imagen el resto de tus días.
Y la idea, ese algo abstracto que tenía en la cabeza, nació. Mi bebé, mi niña.
“La hemos cagado, cariño, se parece a tu madre” fueron las primeras palabras que salieron de mi boca (casi habría sido mejor haberlas dejado en mi mente, los nervios, ya se sabe). Y desde ese momento no paré de mirar que hacían con mi niña… la ponían del derecho, del revés, debajo de una lámpara, pero yo no le quitaba el ojo de encima. Mi mujer preguntaba cosas a las que no tenía ni idea de lo que le estaba respondiendo, hasta que me dijeron “coge la cuna con la niña y llévala a la habitación, que a tu mujer la subimos ahora”. Mi mujer me miró con espanto (estaban haciendo todo lo contrario a lo que ella se había imaginado) y me dijo claramente “QUE NADIE LA TOQUE ANTES QUE YO”.
¡Señor, si, Señor! Como para contradecirla… Y allí me veis a mí, en el ascensor, aun vestido de verde, con una cuna transparente de metacrilato y una cosa pequeñita y roja que hacía ruiditos como un gatito y se movía. No sé como llamé al ascensor, no sé como llamé al piso correcto, solo recuerdo que a todas las personas de mi familia que se cruzaban por mi camino les decía “Tu NO puedes tocaaaaaaaaaaaaaaaar” cual Gandalf en el puente de las Minas de Moria y en mi mente rebotaba la última frase de mi mujer “¡que no la toque nadie, que no la toque nadieeee”. Era mi misión!!!
Y fue cuando toooodas las visitas se fueron y nos quedamos solos mi mujer, mi hija y yo, cuando por fin fui consciente de que aquella pequeña cosita que me cabía prácticamente en una mano era mi hija, un trocito de mi corazón. Cada 5 minutos iba a ver si respiraba, si le hacía falta algo y piensas que la vas a coger mal o la vas romper, hasta que llega la enfermera y ves que la trata como a un peluche viejo y se te quitan todos los miedos.
Y desde aquel momento y excepto cuando está en el colegio o cuando ya estoy tan hasta el gorro de ella que la envío a su habitación (si, una niña lista y charlatana de 7 años puede ser muuuuy cansina), no le he vuelto a quitar el ojo de encima.
¿Cómo explicar qué es ser padre? Es preocuparte mas por otra persona que de ti mismo, es saber que de ti depende la vida de otra persona, en que eres tu quién la va a educar, quien la va a moldear, en que de ti depende la persona que va a ser algún día… ¿Lo voy a hacer bien? ¿Lo voy a hacer mal? Unos libros dicen una cosa, otros dicen otra cosa, y al final te das cuenta de que haces lo que puedes, lo que te dicta el instinto. ¿He cambiado? Claro que he cambiado… hay muchísimas cosas que antes hacía que ahora no hago, hay muchísimas cosas que antes hacía que ahora no haría…
Y hay muchíiiiiisimos días, de esos que te despierta a las 6.30 de la mañana sea lunes o domingo, que no te deja ni ir al wc tranquilo, que te enseña su último dibujo y ante una mala crítica me monta el drama del siglo (me recuerda a su madre, no sé porque…) y que cualquier tontería es para ella una cuestión de vida o muerte… esos días que acabas “saturadito” de tu querida hija y que rezas porque acaben ya sus 24h de pilas alcalinas recargables, si, es en ese momento, cuando se queda dormida y la contemplas al pie de la cama cuando inevitablemente notas como se te expande el corazón y nada de lo anterior importa… ESO ES SER PADRE.
By Planeta Papi
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15 Comentarios
Genial explicación de lo que es ser padre, supongo que es lo que pensáis, y conociéndote como te conozco muy bien redactado, y que sepas que eres muy buen padre y lo estás haciendo genial y la madre también. Un abrazo. Ana Roberto.
Gracias Ana por la parte que me toca, jajaja!!
Que bonito. He revivido muchos momentos leyendo este post. Enhorabuena David, has sabido transmitir la mezcla de sensaciones y añadir un toque d humor
Ana
Gracias Ana, la verdad es que ha quedado muy chulo el post!! Yo también he revivido mi primer embarazo y he disfrutado buscando las fotos de aquel momento… que pequeñita era mi niña!
Tan real como la vida misma,asi es ser padre.Y no te fue tan mal que repetiste.Asi se hace padrazo!
jajaja, muy bueno Carmen, si ha repetido es por algo, jajaja!
quizas,algun dia colabore en otro post….cómo lo vive el padre II, o…."yo soy tu padre"qqgggghhhh….pero se lo dejo a Eli que es un crack en esto
te quiero cielo…..
D
Cuando quieras puedes repetir, sabes que serás bien recibido!!! Gracias cariño <3
Bueno, las últimas frases me han sacado la lagrimita. Pero por favor, DAvid, tú tienes q dedicarte a esto, me ha encantado leerte, escribes muy bien y haces amena la lectura. Yo te propongo un blog donde nos despejes a todas las mujeres muchas dudas de como pensáis los hombres, x ej en el amor jaja, q es siempre nuestra principal preocupación, saber qué circula por vuestra cabeza en muchas situaciones.
Solo decirte que eres un gran padrazo y que los dos hijos q tienes, una bendición. Y yo como tía y madrina, darte las gracias por traer semejantes bellezas al mundo.
Un besazo cuñado.
Si, el final es precioso y muy real! Yo creo que ese blog que propones ya lo tiene en mente desde hace tiempo, es cuestion de ponerse porque lo puede hacer muy bien!
Sin palabras, me ha encantado David.
Un abrazo pareja.
Susana
Nos alegramos de que te haya gustado Susana, gracias 🙂
Hola. Me encanta tu blog y te he nominado para el Premio dardos ¿Lo coges?
http://www.churumbelesymas.com/2015/04/premio-dardos-abril-2015.html#more
Paz
:3 excelente tu post, buscando algunas consejos para padres me encuentro con esta pagina , y mucho mejor con este relato, me encuentro en la primera etapa donde te enteras que seras papa! la verdad es una sensación muy padre , me dejo muy buenos pensamientos este post. te hace ver las cosas de una manera distinta y te motiva a ser ese padre que toda hija o hijo espera! Excelente todo! muchas gracias me gusto mucho!
Hola Kevin! ! Primero darte la enhorabuena por esa nueva paternidad! Ya sabes, muchos mimos a tu pareja y mucha mas paciencia, jajaja… seguro que seras un papa excelente, porque ya mismo estas buscando información para hacerlo super bien! Y encima llegas aqui! Mil gracias por tu opinion acerca del post, mi marido hizo un gran trabajo contando su experiencia en primera persona! Espero que encuentres todo lo que buscas en el blog y sino no dudes en hacer tu petición sobre algun tema en concreto que te inquiete, ok? Arriba a la derecha tienes los botones de redes sociales para que te unas a nuestra comunidad de "satélites" y el email por si quieres comentarme cualquier duda! Un saludo, Elisa